Aquí les dejo la canción que inspira el relato. Pueden escucharlo mientras lo leen. Espero vuestra opinión en los comentarios 😉
Mario suspiró al escuchar los primeros acordes de la canción, 16 añitos de Dani Martín. Nunca se sintió tan identificado con una canción, sentía como si fuese escrita para él. La voz de Daniel le condujo a sus recuerdos más lejanos.
Mario suspiró al escuchar los primeros acordes de la canción, 16 añitos de Dani Martín. Nunca se sintió tan identificado con una canción, sentía como si fuese escrita para él. La voz de Daniel le condujo a sus recuerdos más lejanos.
16 añitos fiera
Me creía el rey del mundo
Con mi lema por bandera
Lo que digan yo no escucho
Me creía el rey del mundo
Con mi lema por bandera
Lo que digan yo no escucho
Llegó a casa con una triste mirada, todo se sentía mal para él. ¿Por qué todos le llevaban la contraria? ¿Por qué no le dejaban hacer su vida tranquilo? "Ya soy mayor" pensaba. Quería salir de fiesta, emborracharse, no quería estar más solo. Sus amigos lo hacían, no quería que lo dejasen de lado por no ser como ellos, ¿por qué sus padres no entienden eso?
Cerró de un portazo la puerta de su habitación y se encerró en su habitación. No comería, quería que sus padres entendiesen que su decisión debía llevarse a cabo, como todo adolescente desea que se haga.
Consiguió ir a la fiesta, no solo a una, sino a muchas de ellas. El alcohol estaba presente en cada una de ellas, al igual que las chicas dispuestas a pasar una noche de diversión junto a él. Sin embargo, llegó un momento en el que se sintió perdido ¿quién era? ¿Por qué debía ser así? ¿Por qué no aceptaban que prefería sacarse una carrera, que estar de fiesta en fiesta? ¿Realmente era aburrido? Comenzó a ahogarse en su propio cuerpo, en su mente, actuaba como si de un robot se tratara.
Y así fue
Me revele contra todo hasta el sol
Viviendo entonces una distorsión
Y me enfadé con el mundo
Malditos complejos que siempre sacan lo peor!
Pensé "en la fuerza estará lo mejor"
Me disfrace de uno que no era yo
Buscando esa firmeza
Llegué a un lugar negro
Pensé que eso era el valor
Una llamada lo sacó de sus pensamientos, respondió y se trataba de su amigo Joel. Una nueva fiesta se realizaría a las afueras, una a la que se negó ir. ¿La respuesta de Joel? "Eres un aburrido. ¿De verdad prefieres pasar la noche entre libros?" Sintió una fuerte opresión en su pecho, no quería perder a sus amigos, pero se negó.
Se alegró de no haber acudido a aquella fiesta, sacó un notable en aquel parcial que tanto le preocupaba. Conoció a Fernando, un compañero de clase, quien no dudó en acercarse a él y felicitarle por la asombrosa nota que sacó.
Los valientes son los que son de verdad
Y los fuertes ni sus guerras
Los valientes los que saben llorar
Con la cara descubierta
Joel ya no lo llamaba, no le importaba, ahora salía con Fernando y su amigos. A veces quedaban para estudiar, para hacer trabajos y ayudarse mutuamente. No echaba de menos su antigua vida, tenía todo lo que quería. Podía ser él mismo y no lo juzgaban, se sentía pletórico por aquello.
Sonrió, escuchando a Amanda entrar en casa. Le saludó con un beso en la mejilla y un abrazo, su nieta era lo mejor que le pasó en la vida, además de su mujer y su preciosa hija. Consiguió ser un médico de prestigio, formar una familia y conseguir diversión cuando era necesario. A sus setenta y nueve años, podía decir que su vida comenzó a cobrar sentido en el momento en el que comenzó a ser él mismo.
16 añitos fiera...
Aquí les dejo un relato inspirado en la canción de Dani Martín. ¿Qué les pareció? ¿Debería hacer secciones así? Podrían dejar alguna canción o serie de palabras en los comentarios para utilizarlo en el próximo relato.
Nos vemos en el próximo post.
Besos, I.
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